miércoles, 22 de octubre de 2008

Eva Ramos. F. Braudel: economía-mundo.

Si acudimos al libro de consulta que se nos ha facilitado para acercarnos a la Historia económica de Europa en un primer momento (Massa, P. y otros: Historia económica de Europa. Siglos XV-XX. Crítica. Barcelona, 2003), también podemos extraer algo más de información acerca de F. Braudel, cuya importancia como autor es evidente, en tanto que aparece nombrado con muchísima frecuencia en lo que Historia económica se refiere.
En el primer capítulo de este libro, aparece nombrado en una primera explicación de la importancia del territorio en relación con los hechos históricos y las actividades económicas. Aquí se explica el modelo teórico de Braudel, denominado “economía-mundo”.
Según él, en la Europa del siglo XV (y en el África septentrional, que se incluye dentro del ámbito de acción europeo, junto al Mediterráneo) existía una autosuficiencia en la satisfacción de las necesidades de la población (en ellas se incluyen las económicas), que implicaba una ausencia de beneficio en los intercambios comerciales que se realizaban más allá de las fronteras. Es decir, que existía un espacio económico muy bien establecido y delimitado.
Por otra parte, el modelo “economía-mundo” pone de relieve los elementos de dinamicidad que permitieron el avance y el desarrollo económico. Éstos fueron los centros urbanos o “polos”, que impulsaron los diversos sectores de la economía. En el siglo XVI fueron dos los polos importantes en Europa, que sirvieron como punto de referencia para todo el sistema económico europeo: las ciudades italianas del Mediterráneo y los centros portuarios del mar Báltico (la Hansa germánica)

1 comentario:

David Alonso dijo...

Eva, tus entradas y aportaciones son muy interesante. El concepto de economía-mundo es fundamental, donde, efectivamente, el peso de las ciudades resultaba de trascendental importancia en el desarrollo económico.
Un saludo,
David Alonso